Ciencia, política y cientificismo, fue publicado en 1969 y las ideas que desarrolla están embebidas en los acontecimientos políticos de la época: la Revolución cubana cumplía su décimo aniversario, la Unión Soviética se había convertido en una potencia económica pero, bajo la dirección de la burocracia estalinista que la encaminaba hacia la restauración capitalista, las condiciones de vida de los trabajadores estaban muy lejos de lo prometido; la aventura guerrillera del Che en Bolivia había llegado a su fin dos años atrás y en Argentina el Cordobazo iniciaba un ciclo de ascenso de las luchas obreras. En Ciencia, política y cientificismo Varsavsky propone:
"… objetivo de estas páginas: hacer un llamamiento a todos los científicos politizados para que se liberen del culto a una ciencia adaptada a las necesidades de este sistema social y dediquen su talento a preparar científicamente su reemplazo por un sistema nuevo, con una ciencia nueva. […] Hay científicos cuya sensibilidad política los lleva a rechazar el sistema social reinante en nuestro país y en toda Latinoamérica. Lo consideran irracional, suicida e injusto de forma y fondo; no creen que simples reformas o desarrollo puedan curar sus males, sino solo disimular sus síntomas más visibles."
Ciencia, política y cientificismo, fue publicado en 1969 y las ideas que desarrolla están embebidas en los acontecimientos políticos de la época: la Revolución cubana cumplía su décimo aniversario, la Unión Soviética se había convertido en una potencia económica pero, bajo la dirección de la burocracia estalinista que la encaminaba hacia la restauración capitalista, las condiciones de vida de los trabajadores estaban muy lejos de lo prometido; la aventura guerrillera del Che en Bolivia había llegado a su fin dos años atrás y en Argentina el Cordobazo iniciaba un ciclo de ascenso de las luchas obreras. En Ciencia, política y cientificismo Varsavsky propone:
"… objetivo de estas páginas: hacer un llamamiento a todos los científicos politizados para que se liberen del culto a una ciencia adaptada a las necesidades de este sistema social y dediquen su talento a preparar científicamente su reemplazo por un sistema nuevo, con una ciencia nueva. […] Hay científicos cuya sensibilidad política los lleva a rechazar el sistema social reinante en nuestro país y en toda Latinoamérica. Lo consideran irracional, suicida e injusto de forma y fondo; no creen que simples reformas o desarrollo puedan curar sus males, sino solo disimular sus síntomas más visibles."